LOS HERMANOS DE LAS LOMAS DE HUANCHACO

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LOS HERMANOS DE LAS LOMAS DE HUANCHACO
Las olas juegan en la monotonía de la mañana, algunas personas saltan y corren en la plenitud de la existencia terrenal.
Subiendo a trescientos metros a la derecha está la Casa de Reposo, y a diferencia del líquido inmenso, allí recién empieza el nuevo amanecer, pernoctan los hermanos que rehacen sus vidas, para superar esos deslices que en un minuto distraído, marcan y te enajenan de los tuyos.
Para avanzar, los pacientes somos conscientes y convencidos de ser víctimas de la adicción y la familia también es corresponsable. Por eso tenemos que luchar férreamente, nosotros y nuestro entorno.
Y luego de la limpia, de tres meses o más, nuestra alma queda atenta para practicar la metodología que imparten los instructores, el sicólogo, el siquiatra y otras especialistas .
No nos curamos, esa es la verdad, sólo controlamos la enfermedad, cuidándonos de no equivocarnos otra vez, teniendo mucha fuerza de voluntad para evitar todo contacto con el vicio. Y saber elegir las nuevas amistades.
Hay hermanitos, que después de estar limpios tres o cinco años, han sumergido en este mundo negro, regresando otra vez a esa angustia fatal que roe el cuerpo y la mente.

Nuestro director lleva treinta años limpio y sigue cuidándose y nos sigue arengando para ser diferentes y recuperar nuestra libertad, a la que todos tenemos derecho.

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