Reportaje, cerca a la Navidad Conversando con Jesucristo

Al abrir los ojos, tenìa “la bruma del sueño”, como dice García Márquez; aproveché que permanecían sentados junto a unas rocas gigantes, para interpelar:

- ¿Por qué del Sinaí?.

Esa mañana cálida, El Padre Celestial y sus apóstoles habían caminado mucho, bajaban del monte Sinaì, al que fueron a meditar y orar para la salvación de la humanidad; reflexionaron sobre los pecados, la incredulidad de la gente y su predisposición para el vicio antes de hacer el bien, de hacerse el bien para todos.

- Debemos ampliar nuestro fervor, dedicamos más tiempo de lo acostumbrado a la meditaciòn y oraciòn; lo hacemos con las manos cogidas para tener fuerza espiritual y de esta manera transmitir nuestra energìa total a los hombres de paz y buena voluntad. Y el Sinaí es un lugar especial, no solamente porque està apartado sino porque es un templo puro para dedicarnos al recogimiento y espiritualidad.

¿Sigue el tiempo del Adviento?

Jesucristo se cruza de brazos, y mira algo distante, parece que no había esperado la pregunta; pero sus ojos exhiben sabiduría y su rostro transmite inteligencia, son impresionantes sus gestos; atraen siempre atraen.

- Sabes que Adviento significa llegada. Nos preparamos para recibir al Salvador, explicó; Él que inició todo un periplo por la anchura de la tierra, dando el mensaje, haciendo llegar la palabra del Redentor, porque su llegada será para salvar al mundo de la mácula.

¿Salvación de qué y para qué?

Caminó, avanzó y retrocedió al lugar de la conversación, miró el horizonte azul como sus ojos y habló con energía, ya no como el modo pausado al iniciar la interviú.

- No existe provocación ni odio, cuando tenemos el corazón limpio y puro, cuando hacemos el bien, cuando ayudamos a los demás, cuando ofrendamos en nuestra religión. De modo que te contestará diciendo que todos para salvarnos del pecado debemos procurar estar limpios, sin mancha, sin caer en las bajos instintos; eso es la salvación. Y para que vivamos de manera diferente, viendo por los demás, extendiendo la mano a quien lo necesita, teniendo un hogar mejor, una sociedad mejor, una Universidad mejor.

-¿ O sea para no ir al Infierno ?

Esta vez habla con mayor soltura, menos irreverente, su manera de expresarse se torna màs familiar, màs asequible.

- Exactamente, en la tierra, a pesar de que nuestras diferentes Iglesias se pasan la vida llamando a la conciencia y a la buena convivencia social, económica y cultural, no se ha tenido el cambio que esperábamos. El hombre sigue pecando y pecando y en consecuencia se van a ir a pagar sus culpas al infierno, todo por hacer caso al diablo. Y nadie los puede salvar.

-¿Pero Ud. es Dios, los puede transformar?

Mi enseñanza es la prédica, la palabra profunda sabia y de hondura de la vida, yo lo puedo enseñar pero su cambio es voluntario, porque la persona es pensante, así como piensa en lo malo, tiene la capacidad suficiente de volver a empezar, sabiendo que lo bueno significa comportarse bien, ser responsable y respetuosos con los demás. El verdadero camino nunca es ni será el que tiene flores, sino el lleno de espinas, el que ofrece muchas pruebas; porque debajo de las dificultades están las virtudes y el pensamiento de grandeza humana. El camino más corto no es el más recomendable para llegar a la meta.



LOS NIÑOS Y EL MUNDO

-¿Hay cerca de ocho millones de niños que padecen hambre en el mundo?

Jesucristo vuelve a sentarse en la misma roca, estira las piernas rápidamente y las recoge, medita un momento y recupera su tono filosófico, luego se rostro se torna nostálgico, habla con preocupación y sentimiento.

- Nunca pensé que mis niños, a quienes amo tanto sufran también tanto. Los veo en el África donde mueren de hambre diariamente, por una mala administración de las potencias económicas, que no comparten su riqueza y pan con los menos desposeídos; algunos les interesa acumular grandes fortunas; pero cuando uno muere no lleva nada, porque estamos de tránsito, de paso por la tierra.

-Debemos acrecentar la Fe?

Todos debemos acrecentar la fe, niños y adultos, esta hace crecer la esperanza y fortificar nuestras fuerzas internas; de tal modo que quedamos libres y despejados para cumplir las tareas en las diversas circunstancias que enfrentemos. Y las cadenas de oraciones deben ser más insistentes; porque sin fe no somos nada. UN pueblo sin fe no tiene esperanza de resurgir.

¿También, tener buenos gobernantes?

Piensa brevemente, va hablar, se detiene; piensa nuevamente y esta vez habla.

- Es increíble que con tantos años el hombre no logre sobrellevarse, pasan muchas generaciones y siguen teniendo los mismos problemas y debilidades.

-¿El ser humano es imagen y semejanza de su creador?

Así fue concebido; en el sentido de que se le otorgó vida propia y como su creador para ayudar a los demás, compartir y ser buenos humanos, en el mejor sentido de la palabra hacer

el bien sin mirar a quien.

¿-Algunos niegan su existencia, por tanto problema que existe ?

Es natural que hay discrepancias, hasta cólera por las dificultades que atraviesa el hombre; pero el responsable es él porque no sabe administrarse, no sabe gobernarse, es víctima de su propia gracia o desgracia. Las enseñanzas están dadas a través de diferentes códigos y si es que no se tiene en cuenta y no se respeta, no se cumplen, lógicamente devendrán en problemas serios.

¿Amaos los unos a los otros, por ejemplo ?

Efectivamente, si hiciéramos caso de este precepto, menos serían los problemas y menos las dificultades; por el contrario la sociedad se desenvolvería con armonía, tranquilidad, los hogares se amarían más y por consiguiente la felicidad estaría cerca. A mi no se me puede acusar de que soy el responsable de las dificultades, cuando es el mismo ser humano que hace y forma su destino; esa es la verdad y realidad de los hechos.



¿Evade responsabilidades?

Sonríe ligeramente, abraza al periodista y en tono más cercano, confiesa.

-De ninguna manera, yo soy el Padre Superior y cuido en todo momento a mis hijos de la tierra; y sucede lo que sucede en el mundo; como en todo hogar, hay hijos buenos y malos; hijos que se esfuerzan por hacer un nombre un apellido, por destacar, que estudian duro, se sacrifican. Y los hay también, haraganes, que nunca se preocupan por nada. Y el que lucha es algo y el haragán es nada, nada. Y Yo no soy el responsable, yo les di a todos facultades para que lleguen a su meta; no hacerlo es problema de cada uno. Al que me llama, yo voy, al que tiene fe, lo ayudo.

LA NAVIDAD Y LA COMERCIALIZACION

Me ha pedido un receso de quince minutos, porque tenía que explicarles a sus apóstoles, como apoyar para el mejor cumplimiento de la Navidad hasta en los países comunistas, en donde se ha impuesto ya la celebración de la Natividad, caso Cuba y Rusia, por ejemplo. Yo aprovecho para releer mis notas y mis preguntas y para tornar a mi lectura de “Reportajes” de Manuel Jesús Orbegoso, toda una institución en el periodismo peruano. Y del que grabé la frase, que me dio más valor: “al calamar hay que comerlo en su tinta”

-Que significa la Navidad?

La Navidad significa para el mundo cristiano, recuerda el entrevistado, el nacimiento de Dios, que vino para redimir y salvar del pecado a la humanidad. El nacer en un pesebre, representa la humildad y sencillez de las personas; reconocernos honestos y sencillos para hermanarnos cada vez más, bajo un techo con cosas elementales y no el boato, el lujo, la gula, que desfiguran el verdadero rostro humano. Hoy se ha comercializado mucho la Navidad.

¿Hay que tener presente la sencillez?

De eso se trata, la sencillez es síntesis de grandeza. Imitando al Redentor, solo se debe tener lo necesario, lo que se va a utilizar; porque tener cosas vánales, va contra el verdadero camino de Dios, que lo dejó todo, que sacrificó todo para revalorar y salvar al hombre. Notamos que mujeres, sin mucha necesidad venden su cuerpo para tener mucho dinero, mucho lujo, mucho confort; hombres que llegan al crimen para alcanzar fama y fortuna. Esto va contra la moral, contra las buenas costumbres y son hechos negativos que van contra el desarrollo normal de la sociedad.

¿Mucho negocio, mucha deformación?

Claro. Mucho negocio y mucha deformación se ha impuesto en las fiestas navideñas. Se ha perdido su verdadero carácter de fiesta religiosa, de hermandad, de familiaridad, de perdòn para llevarnos bien, en calma, con alegría y dispuestos a momentos de sosiego y paz. Va contra los niños, les dan juguetes que incentivan la guerra, regalan muñecas, que perpetúan su mensaje de ama de casa. La deformaciòn està en todo sentido.

RETORNAR AL ORIGEN

El Padre Celestial se ha vuelto más juicioso, más pensativo para conversar; escucha a sus acompañantes, quienes además de hablar en conjunto, hacen señas para comunicarse; les repite palabras que yo no entiendo. La mañana ha seguido su curso con normalidad, aunque un ligero viento llegaba de vez en cuando a nuestros rostros; viento y un acompañante sol radiante, hermoso en su plenitud de alumbramiento, llegaban a los presentes y una plantas gigantes que completaban el paisaje eterno.

-¿Volver al pasado?

Sí, sí, retornar al pasado a lo natural a su significado primigenio de la humanidad, no es tarde jamás cuando se trata de reconocer errores y recuperar una personalidad o un orden de cosas. Debemos recuperar las lecciones iniciales como modelo verdadero de vida de los hombres en la tierra, debemos regresar al pasado para sacar buenas enseñanzas y no abandonar jamás eses modelo. La actirtud del mismo hombre lo lleva al bien o al mal. Pero esta Navidad esforcémonos por dar mucho amor y mucho afecto a nuestros niños, porque ellos son los que se merecen el mayor de nuestro cariño



Abrazo al Maestro y me retiro; lo veo ascender y una fiesta de nubes abrirse y cerrarse a su paso; detrás de él, sus apóstoles que lo siguen en círculo. Mi corazón se ha agitado, luego me calmo. Y también soy de la opinión que hay mucha negatividad en la sociedad, corrupciones que terminan en manejos ideológicos, para manipular determinado sistema, con la complicidad de alfiles o peones que por alguna dádiva o pequeña recompensa se prestan para el asunto. Y eso es la consecuencia para la navidad comercializada.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Los Días y El Viento

Creencias populares en la obra de Adolfo Alva Lescano

Esthefany Cardoso, vuelve a los escenarios